Le suplico me presente sus excusas.
Pórtese como un caballero y responda.
En caso de negarse tendrá que aceptar el duelo.
lunes, 30 de marzo de 2015
Autobiografía #2010
Abuso de las comas, de los signos de exclamación, del chocolate y ya no tanto de las drogas.
Me hace falta una mascota, un amor y más dinero, en ese orden.
Extraño siempre a las mismas personas, a veces a gente que no conozco y a vos casi nunca.
Mi imaginación me libera y esclaviza.
Tengo en el cajón de la cocina una tijera que no corta y no la tiro porque sería como matarla.
Me gustaría recibir una carta con sobre, remitente y estampilla de correo.
Me convencen la locura, la pureza de algunas inocencias disimuladas y los regalos cariñosamente extorsivos.
Ahora que lo pienso podría afilar la tijera.
Pienso mucho, actúo poco y manejo como experta el arte de malgastar el tiempo.
Poseo una capacidad increíble para ponerme de mal humor y soy hija única.
Sospecho, casi siempre, que la gente no me recuerda.
Me hace falta una mascota, un amor y más dinero, en ese orden.
Extraño siempre a las mismas personas, a veces a gente que no conozco y a vos casi nunca.
Mi imaginación me libera y esclaviza.
Tengo en el cajón de la cocina una tijera que no corta y no la tiro porque sería como matarla.
Me gustaría recibir una carta con sobre, remitente y estampilla de correo.
Me convencen la locura, la pureza de algunas inocencias disimuladas y los regalos cariñosamente extorsivos.
Ahora que lo pienso podría afilar la tijera.
Pienso mucho, actúo poco y manejo como experta el arte de malgastar el tiempo.
Poseo una capacidad increíble para ponerme de mal humor y soy hija única.
Sospecho, casi siempre, que la gente no me recuerda.
sábado, 28 de marzo de 2015
No Ella y Él
Ella sabe que su belleza lo lastima del modo más dulce y perverso. Y no le importa, él siempre se siente lastimado por algo. Además está acostumbrada a sentir que siendo como es lastima a los demás. Percibe (aunque al principio lo niegue o finja no entenderlo) que es el mecanismo que él necesita para cubrir sus miserias -que no son las de ella-; intuye su miedo a perderla, su miedo a la soledad en vez de la adrenalina por descubrirse siempre un poco más; presiente que él (en vez de simplemente amarla) desea poseerla. Se siente atrapada y quiere salir corriendo de la relación. Tarda en hacerlo, porque primero intenta en vano solucionar ese desfasaje (que él ignora totalmente) para disfrazar sus miserias, -y ahora si son las de ella-.
A ella le cuesta salir del círculo y él es un idiota.
jueves, 19 de marzo de 2015
Y la nave va de Federico Fellini
Orlando, un
reportero, es el encargado de narrar la crónica del viaje y el hilo conductor
entre los diversos personajes e historias que tienen lugar en 1914 cuando un
barco de lujo parte para llevar las cenizas de una famosa cantante de ópera,
Edmea Tetua, y arrojarlas frente a la isla en que ella nació
Los personajes
deambulan por la embarcación y forman
parte de un universo único y cerrado, viven situaciones que oscilan entre lo
divertido y lo patético. Son prisioneros de una nave que se dirige a un lugar
mítico e irrecuperable. Cuando hablan de Tetua dan informaciones absolutamente
contradictorias que no nos dejan saber bien cómo fue. Orlando primero se
mantiene al margen de todo y se dedica a explicar a cámara lo que sucede pero a
medida que la película avanza se convierte en un personaje que participa en las
acciones y abandona de a poco la costumbre de hablarle a la cámara. De esta
manera Fellini juega con la idea de narrar. El narrador de esta película e Brechtiano,
en él se conjuga todo el saber Circense,
romántico, tierno y ridículo, influye en la
posibilidad de distanciamiento. El efecto de
distanciamiento tiene la intención de que
el público no se identifique con la representación sino que en todo
momento sepa que la misma es una ficción. La extrañación consiste
en una representación que permite conocer al objeto y al mismo tiempo lo hace
parecer extraño en relación consigo mismo, rompe con el ensimismamiento, vuelve
activo al espectador.
Las
situaciones que viven los personajes acomodados (personas cercanas a la
cantante) se mezclan con el mundo obrero. La travesía del cortejo funerario no viaja por
mares tranquilos, ciertas dificultades de la lucha de clases y el fantasma de
la guerra se ven con la llegada al barco de unos refugiados serbios primero y
con la aparición de un amenazante buque de guerra después. Parece como si
Fellini quisiera subrayar que pese a que esta gente de clase alta vive en un
mundo lujoso y acomodado es inevitable que terminen entrando en contacto con
personas más humildes. Las interpretaciones están condicionadas por lo que Brecht llama “gesto social”, es decir, los
personajes deben elaborarse (actitudes corporales, vocales y expresivas)
teniendo en cuenta que son producto de condiciones sociales y materiales pero
no deben caer en un “reflejo” de la realidad. El realismo que plantea Brecht es
un realismo científico que consta de conocimiento y puesta en evidencia del
proceso de producción, del proceso de emancipación, conocimiento y denuncia del
proceso de explotación. Todos estos procesos aparecen manifestados en el
transcurso de la obra, en las puestas en escena que no disimulan ser
escenografías y en la caracterización de los personajes.
Lo que Fellini
nos quiere mostrar en Y la nave va es el
fin de una época. Es una parodia al mundo de la música, una obra de arte
grotesca que narra un ritual fúnebre donde la represión y la discriminación
están presentes como así también la locura, el amor y la lucha de clases. Aquí,
como en muchos otros casos, Fellini practica la reducción al absurdo de las
ideologías representadas a través del
humor y de la risa.
Los primeros
minutos de la película son un homenaje al cine mudo. Se ven imágenes del puerto
en blanco y negro mientras van llegando los protagonistas. Luego aparece el
sonido y el color. Apuesta por un tratamiento visual artificioso. No trata de
ocultarlo sino más bien lo remarca y agudiza ayudado por la iluminación y el
tratamiento del color. Amante de las oposiciones
y en contra de un cine grandilocuente, seduce al espectador a través de
rupturas y transgresiones.
sábado, 14 de marzo de 2015
jueves, 12 de marzo de 2015
Roma Ciudad abierta de Roberto Rossellini
Filmada con un presupuesto muy reducido debido a la
crisis económica que sufría Italia el guión se basa en la historia real de un
sacerdote que ayudaba a la resistencia italiana. La acción dramática tiene
lugar en Roma durante la ocupación nazi. Cuenta historias de resistencia y
lucha. La de “Pina” (Magnani), una viuda, madre de un hijo de 8 años, Marcello;
que se cruza con la de Giorgio Manfredi/Luigi Ferraris (Pagliero), comunista, miembro
de la Junta Superior de la Resistencia romana; la de Pietro Pellegrini
(Fabrizi), un cura que asiste a rebeldes y desertores alemanes; y la de
Francesco (Granjacquet), miembro de una publicación clandestina y novio de “Pina”.
Estos personajes junto con los vecinos, los niños y todos los que sufren y luchan
por la libertad, representan al pueblo de Roma, el verdadero protagonista de
esta historia.
Participan
actores aficionados y grandes actores profesionales. Se captan personas reales
en escenarios conocidos (calles, espacios abiertos, casas, iglesia). El relato: sincero, verosímil y auténtico, rompe las
convenciones narrativas hasta ese entonces utilizadas e impone cambios en la
manera de mirar, explicar y narrar. Rossellini muestra el sufrimiento popular
contando la historia de unas personas que no se quedan con los brazos cruzados
ante la ocupación nazi. Se acerca a las
situaciones que generan los totalitarismos de manera espontánea, natural,
sincera y verosímil. Y eso lo logra con una puesta en escena nada artificiosa.
Filma en escenarios reales cargados de elementos documentales que generan una sensación de realidad. A través de un
cine cercano a lo cotidiano y despojado de juicios morales es como logra que el
realismo se apoye en la neutralidad del relato y así reducir el dolor a niveles
soportables para los espectadores.
Lo verosímil podemos encontrarlo: en los escenarios
reales; en los gestos de la cara de Anna Magnani, ícono cinematográfico de la
gente sencilla; en los diálogos; en la madurez de los niños que han vivido una
guerra; en la determinación de un sacerdote que no se queda sin actuar ante los
nazis; en el riesgo que corren los hombres que se comprometen con la
liberación; en la traición, la inmoralidad y el transcurso de los
acontecimientos pero también en la esperanza y el amor para seguir creyendo en
el mañana.
Roma ciudad abierta es una representación creíble y
emocionante del clima de opresión, impunidad, excesos, muerte y lucha que se
vivía en Europa en aquella época. Rechaza la violación de los derechos humanos,
las ideologías totalitarias y los abusos. Enaltece la solidaridad ciudadana, la
capacidad de resistencia, la lucha, la dignidad, la libertad y la esperanza. . E
invita a la tolerancia entre ideologías distintas y a la colaboración para el
bien común.
jueves, 5 de marzo de 2015
Milagro en Milán de Vittorio De Sica
Totó, un joven huérfano inocente y con pocas luces, vive
junto con otra gente en un asentamiento en las afueras de Milán, producto de la
inmigración que huye de la escasez de la posguerra. Cuando se descubre petróleo
en el terreno donde viven, el protagonista decide enfrentarse al dueño de la
tierra, el poderoso señor Mobbi que sólo piensa en hacer negocios.
La tragedia y la comedia se mezclan desde que se crea
el poblado: aparecen retratados el racismo, los abusos, mentiras y estafas, el despotismo
y la dominación. El film reivindica a los personajes que viven en la miseria,
llenos de amor y respeto, que resistieron incluso una infancia difícil que no
ha podido socavar los buenos sentimientos. Totó es un personaje cargado de
bondad, ingenuidad e inocencia que lucha sin rencor contra una sociedad injusta
que monopoliza los recursos y abandona a los que menos tienen.
El abandono queda plasmado en imágenes que muestran la
crudeza de la época de posguerra: calles desoladas, descampados llenos de
escombros, nubes grises, mendigos amontonados compartiendo un rayo de sol, Totó
niño acompañando solo el ataúd de su madre adoptiva mientras la ciudad continúa
su rutina logrando que la muerte se
convierta en un elemento más del paisaje. De Sica retrata las amenazas que
pervierten y condicionan las relaciones humanas, atravesadas por intereses
económicos y las consecuencias de la lucha de clases.
Cargadas de de elementos fantásticos percibido por los
personajes como algo normal, característica del realismo mágico, se suceden escenas para el recuerdo llenas de
ingenio y poesía: Totó entre los repollos, las casas que cambian de lugar, el
enano que crece, el hombre que controla la humedad, la conversación perruna, la
madre seguida por los ángeles, la resurrección de la estatua, etc. Se transforma
lo cotidiano en una experiencia extraordinaria, la narración de hechos de la
realidad se combina con el mundo imaginario.
El final de la película hace girar la historia hacia
lo fantástico cuando un milagro – todos los personajes huyen de la policía
sobrevolando, montados en escobas, la catedral de Milán- compensa los esfuerzos de los humildes para
salir adelante y es justamente eso lo que la vuelve tan profunda y encantadora.
Milagro en Milán es una alegoría fantástica a cerca de
la pobreza y las injusticias sociales. De Sica a través de fundir la realidad
narrativa con elementos fantásticos y fabulosos propone soluciones inocentes y
genera que los personajes realicen acciones inesperadas en contra de una
autoridad que los oprime.
lunes, 2 de marzo de 2015
Memoria y despedida
Una amiga me comentó que tiene problemas con los
recuerdos. Por eso estoy escribiendo esto, en su honor y
a modo de despedida.
La memoria no es la facultad de revivir lo pasado ni la de
conservar y recordar los conocimientos adquiridos; si no más bien la de
conservar pensamientos para luego reproducir estados de conciencia ya
experimentados. La memoria es sensible, es mujer y a veces, ininteligiblemente depende de la
inteligencia.
La memoria es compleja y se pueden distinguir cuatro
momentos:
1)
Fijación y conservación (de los
recuerdos).
Aquí, la
inteligencia es un factor importantísimo de la conservación y la organización
de los recuerdos. La intensidad y la repetición son factores que intervienen en
la organización de las ideas. Suele decirse que se fijan y se conservan mejor
las ideas (y sentimientos) cuanto mayor haya sido la impresión vivida y cuanto
más unidas entre sí estén por la lógica.
2) Reproducción
(de los recuerdos).
Si no se presentan solos, esta etapa supone un esfuerzo
para activar la asociación de ideas y así encontrar el recuerdo buscado.
3) Reconocimiento
(de los recuerdos).
El recuerdo comienza a ser verdadero cuando: lo reconocemos
como algo íntimamente personal, lo reconocemos como un estado ya experimentado anteriormente, lo reconocemos como un elemento del pasado. Por eso la memoria se diferencia de la
imaginación y ambas de la percepción.
4) Localización
(de los recuerdos).
Para conseguir esto la memoria hace un recorrido por diferentes y
viejas situaciones para encontrar el lugar donde se encuentra el
recuerdo buscado. El camino de los antiguos estados de conciencia está formado
por sucesos importantes alrededor de los cuales se clasifican y ordenan los de
menor intensidad.
Y acá comienza la despedida, un poco más sinceramente.
Lo que estoy intentando decir, por fuerte que suene y a
pesar de ser filosofía barata, es que: la cantidad de repeticiones es
inversamente proporcional a la atención que se le da a la lección por aprender.
Y que memoria no sólo son recuerdos si no también conocimiento. Y que el
conocimiento se reduce a la sensación y a las transformaciones de esa
sensación, ya que todas las ideas vienen de los sentidos. Y que las
observaciones activas y sus reflexiones concomitantes se relacionan
intrínsecamente con la atención que uno presta y con la moral. Y que la verdad
tiene que estar siempre de acuerdo consigo misma.
También intento decir que: para aprender a pensar,
indispensablemente hay que ejercitar la memoria. Para retener las cosas, lo
mejor es unirlas según su orden natural, hay que comprender para animarse
recordar (o tal vez recordamos para no dejar de comprender). Se aprende
muchísimo mejor cuanto más se comprende el encadenamiento de ideas,
sentimientos e imágenes. Sucede todo lo contrario cuando se avanza en pequeños
fragmentos.
Aprender a clasificar ideas, aprender a ordenar recuerdos,
aprender a distinguir lo accesorio de lo esencial, es aprender a olvidar. Y
aprender a olvidar es una regla sumamente importante para no sobrecargar la
memoria y mantenerla siempre pronta y limpia de inutilidades.
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